viernes, 6 de marzo de 2015

Ciencia en Ecuador: Nueva trampa para capturar vectores de Leishmania

Escrito por Andrés Carrazco Montalvo (@AndresRCM
Editor: Daniel Romero-Álvarez (@Vakdaro)

Los machos de Lutzomyia sps. (arriba) se alimentan de néctar; son las hembras las que necesitan de la sangre, rica en proteínas, para el desarrollo de sus huevos. Durante el proceso, transmiten el parásito a sus hospederos definitivos.  



Los flebótomos, también llamados moscas de arena (por su color), son considerados vectores o “vehículos” que transportan y transmiten agentes infecciosos causantes de enfermedades como: bartonelosis y leishmaniasis. La última se produce por el flebótomo del género Phlebotomus en el Viejo Mundo y el género Lutzomyia en el Nuevo Mundo. Éste causa infección cuando transporta al parásito Leishmania, que de acuerdo a su especie, puede generar daños de tipo cutáneo, subcutáneo y visceral en la población que se ubica en zonas tropicales de países como Ecuador.

Para estudiar el endemismo, comportamiento, ubicación geográfica e incidencia de estos vectores, es necesario realizar colectas de muestras que sean útiles para realizar análisis estadísticos, poblacionales y epidemiológicos. Con el transcurso del tiempo se han diseñado distintos tipos de trampas que facilitan estos trabajos.

En un estudio realizado por Hashiguchi y su equipo, en 4 zonas tropicales de Ecuador, entre los años 2013-2014, se lograron colectar un total de 1 480 flebótomos hembras pertenecientes a 25 especies de Lutzomyia. Para la colecta se utilizaron tres tipos de trampas:

   .- La trampa mini-Shannon, con la que se colectaron 417 especímenes (28.2 %)
   .- La trampa de luz CDC, que arrojó 259 especímenes (17.5%)
   .- El método “human landing”, donde se obtuvo 804 especímenes (54.3%)

Como se observa los datos de muestreo varían, lo que pudo haber ocurrido debido a factores ambientales, de ubicación o hasta por el tipo de trampa que se utilizó.

Sin embargo, estos resultados no solo indican la presencia del vector de Leishmania, sino también, han dado lugar al desarrollo de la nueva trampa “mini-Shannon” antes mencionada. Esta trampa pesa tan solo 300 gramos, tiene un diseño similar a una carpa cuadrada sin base, compuesta por algún tipo de cebo y con luz de tipo LED que atrae a los flebótomos.

Además, la trampa trae beneficios al investigador, porque demanda menos gastos económicos que la trampa de luz CDC, no trae riesgos elevados como el método “human landing” (donde el ser humano actúa como cebo para los vectores), y en especial, debido a su peso y tamaño permite el muestreo en zonas de difícil acceso como lugares boscosos, rocosos y estrechos localizados en Ecuador.

El encontrar estos nuevos métodos de captura permite que aumente el rango de muestreo, obteniendo muestras de lugares poco comunes y elevando el nivel de investigación y conocimiento científico de la leishmaniasis en Ecuador y, en un futuro, en el mundo.

El artículo original disponible (open-acces) en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4287492/