domingo, 13 de diciembre de 2015

El internet y la revolución


Escrito por: Andrea Romero

La máscara de Guy Fawkes popularizada a partir de la película "V de Venganza" ha sido utilizada en diferentes revoluciones en varias partes del mundo. 
Partamos de la pregunta ¿A qué consideramos revolución? Es un avance hacia un cambio rápido y productor de una situación irreversible (Childe 1988). La consideramos un cambio en la organización, en la cultura, en el pensamiento; no por nada proviene del latín revuelta, y eso es exactamente lo que significa el internet para el mundo.

Cronológicamente y como empiezan todas las grandes ideas, el internet nació como una idea descabellada, que pasó de ser de uso exclusivo de las élites y de ser creada para fines bélicos a llegar a los rincones más remotos del planeta , a estar al alcance de todos, y a ser utilizada en infinidad de tareas.

Entonces el internet en sí mismo es una revolución pues involucra una transformación radical del pasado inmediato; comunicacionalmente se volvió una máquina del tiempo, un elemento transportador, ofreciéndonos el mundo a un clic de distancia.

Al tener el internet como herramienta olvidamos que también podría convertirse en un arma. La primavera árabe, una serie de alzamientos populares acontecidos desde el 2010 en los países donde por primera vez se usó el internet como medio de protesta y difusión de ideas de derrocamiento, esta guerra se libró desde ambos frentes pues mientras el pueblo convocaba levantamientos por Facebook y twitter, el gobierno buscaba la manera de censurar esto medios a lo que se consideró un atentado a la libertad. 

“En nuestro afán por celebrar el poder democratizador del internet nos olvidamos que también puede ser una herramienta de represión” (Evgeny 2011). De esta manera se desencadenó la idea del internet ya no solo como una forma de expresión sino también como un derecho; incluso las grandes empresas como Google, Yahoo, etc. se unieron a esta lucha que tuvo como consecuencia que la ONU incluyera el acceso a internet dentro de los derechos humanos.

Esta revolución dio pie a muchas más como la fusión de la figura de Guy Fawkes, revolucionario inglés, popularizado con la película V de venganza (2005) con el grupo previamente formado Anonymous dándole un rostro a la revolución informática. Wikileaks, otra de las grandes figuras que busca develar contenidos no éticos y poco ortodoxos, está en procesos de censura, represión e incluso de ataque cibernético, así que el internet no fue, es una revolución.

El internet nos ha llevado desde el primer mail allá por el 1971 que conectaba a 2 personas, a conectar a millones a pelear por una causa. La verdadera revolución está en nuestras manos y el internet no es sino la herramienta más práctica para ello. Hoy el internet es un derecho, es un derecho la revolución.

Referencias: 

·      1.- Childe Coloquie (1988) “Estudios sobre revoluciones neolíticas y urbanas”, Vol 2 UNAM
·       2.- Morzov Evgeny (2011) “The Internet es a tyrant´s friend”

jueves, 10 de diciembre de 2015

Periodismo Científico

Escrito por: Daniel Romero-Álvarez / @Vakdaro

Integrantes del Taller de Divulgación Científica en el MIC.
Foto: Daniel Romero-Álvarez
"¿Por qué tiembla la Tierra?", "No soy hijo de mis padres", "El rostro de mis ancestros", etc, tres títulos llamativos, de los productos del taller de divulgación científica que se organizó en el Museo Interactivo de Ciencia esta semana. De los textos mencionados, ninguno logró su objetivo completo: transmitir temas difíciles de manera sencilla, pero se aprendieron varias cosas.

El taller, que la mayor parte del tiempo fue un diálogo, estuvo dirigido por Rodolfo Asar, el líder del siempre recordado Mitos y Verdades, quien con tino y humor trasmitió el entusiasmo y pasión del mundo científico -armas fundamentales de cualquier rama de la educación - además de una serie de consejos directos y concretos para que la transmisión de las ideas académicas sea la mejor, entre ellos: títulos llamativos, la esencia de un primer párrafo que enganche, y nunca (PERO NUNCA) olvidar hacer metáforas para explicar la teoría, por ejemplo, un cerebro trino contenido uno dentro de otro, con una muñeca rusa (Matroska). 

Gracias a la invitación de María Elisa Campos, comunicadora del MIC, nos unimos a las filas de comunicadores sociales de varias ramas del periodismo para también compartir nuestros conocimientos en este ámbito, fue enriquecedor poder compartir la importancia de dominar el tema, ordenar el génesis de la Biblia de acuerdo a la realidad científica y abrir las puertas para futuras colaboraciones.

Al final del taller tuvimos la oportunidad de disfrutar de uno de los capítulos de Mitos y Verdades, innegable hito de la divulgación científica del país. En las últimas escenas, un Rodolfo del pasado nos recordaba que nuestros rastros animales son innegables y en vista a la abrumadora evidencia es fundamental aceptarlo. Luego de los aplausos, un Rodolfo del presente nos recordó que si bien el periodismo científico ecuatoriano continúa en su infancia, es fundamental aceptar esta evidencia y poner manos a la obra para construir la divulgación científica del mañana. 

miércoles, 9 de septiembre de 2015

La Batalla Aérea en los Cielos de Ecuador


Autor: Nicolas J. Dowdy
Department of Biology
Wake Forest University

Traducción: Andrea Vargas



Cada noche en los cielos del Ecuador se libra una batalla aérea.  Murciélagos, los únicos mamíferos capaces de verdadero vuelo, usan sofisticados impulsos ultrasónicos llamados ecolocación o biosonar para detectar y cazar a sus presas en absoluta oscuridad. 

                                                                                       ©Nick Dowdy                                                       


Sin embargo no todos estos insectos están completamente indefensos.  Cerca de la mitad de las especies de polillas han evolucionado oídos que detectan a los murciélagos, permitiéndoles evadir los ataques con maniobras evasivas de vuelo o picadas en espiral. Sin embargo, algunas polillas no se limitan a evadir los ataques. Las polillas tigre (Erebidae: Arctiinae) tienen la habilidad única de generar sus propias señales ultrasónicas usando un órgano de producción de sonido llamado el “órgano tymbal”. Los sonidos producidos por estas polillas asemejan chasquidos  y se emiten cuando el órgano tymbal está siendo flexionado y relajado repetidamente.

Las polillas tigre secuestran potentes toxinas de sus plantas huéspedes durante estados larvarios y usan estos químicos para protegerse contra la depredación. Estas polillas son visualmente aposemáticas, es decir que poseen colores de advertencia como rojos llamativos, amarillos, naranjas y otros altamente contrastantes con patrones muy conspicuos. Depredadores visuales, tales como los pájaros, asocian los colores claros y patrones visuales con el sabor dañino de dichas polillas y aprenden a evadirlas como presas. Los murciélagos, en cambio, no ven estos colores en la noche por lo que las polillas tigre desarrollaron la habilidad de enviar señales acústicas a estos depredadores. 

Experimentos en el campo y en laboratorio han confirmado que los murciélagos aprenden rápidamente a asociar estos sonidos con presas no comestibles y evitan capturar polillas que emitan estos sonidos. No obstante, no todas las polillas que producen estos sonidos son realmente tóxicas. Algunas especies de polillas tigre engañan a los murciélagos imitando los sonidos de las tóxicas cuando en verdad representarían una buena comida.

Pero estos no son los únicos usos de los sonidos anti-murciélago producidos por estas polillas. Por lo menos una especie Bertholdia trigona, ha desarrollado la habilidad de interrumpir o obstruir la ecolocación de los murciélagos.  Dicha polilla produce tanto sonido que interfiere con la habilidad de ataque del murciélago para determinar donde ésta se encuentra, provocándole una “visión borrosa”. Estos sonidos disruptivos provocan que los murciélagos no calculen sus trayectorias de ataque, permitiéndoles a las polillas de esta especie escapar sin el más mínimo rasguño.

                                                                                         ©Nick Dowdy                                                       

Sorprendentemente las polillas tigre han evolucionado también otro uso para estos sonidos. Algunas especies han optado por utilizar las señales anti-murciélago como canto de cortejo. Machos y hembras chasquean el uno al otro en manifestaciones sexuales acústicas antes de reproducirse. Se cree que estas señales ayudan a asegurar la reproducción con la especie correcta. Estudiar las emisiones de las polillas tigre ha provisto grandes revelaciones en el proceso de co-evolución entre predadores y presas. 
Se debe tomar en cuenta que las polillas no son los únicos insectos nocturnos que tienen que lidiar con la depredación de los murciélagos.  Los oídos que detectan murciélagos están presentes también en escarabajos, mantidos, crisopas, grillos, saltamontes y langostas, sin embargo existen muchos grupos de insectos que no han sido estudiados.
Nuestro conocimiento en el ultrasonido anti murciélago generado por los insectos es muy limitado. Debe añadirse que la evolución no sucede en el vacío. Estamos seguros de encontrar especies de murciélagos que han evolucionado estrategias de contraataque para frustrar las defensas de los insectos. Un ejemplo es el murciélago Barbastella barbastellus que clandestinamente hace ecolocación usando sonidos muy bajos para que los insectos no lo detecten hasta cuando ya es muy tarde.
El futuro luce brillante para los biólogos que estudian estos animales nocturnos.

Mira este video de los ataques y contraataques entre murciélagos y polillas.
Youtube "Moth jamming bat-National Geographic Untamed Americas":



Autor del artículo:

Nicolas J. Dowdy
Department of Biology1834 Wake Forest Road
Wake Forest University
Winston Salem, NC, USA 27109
Email: njdowdy@gmail.com
Website: www.njdowdy.com

martes, 30 de junio de 2015

Propiedades catalíticas del oro

Por Wilson González-Espada, Ciencia Puerto Rico






Científicos de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez publicaron un estudio describiendo el uso de este metal precioso como catalizador.

Los elementos químicos se dividen en tres grupos principales basados en sus propiedades físicas y químicas: metales, no-metales y metaloides. Los metales son la mayoría y, con excepción del mercurio, todos son sólidos.

Pero no todos los metales tienen propiedades idénticas. Existe un grupito al que se conoce como “metales nobles”, ya que son extremadamente resistentes a la corrosión y a la oxidación. Algunos ejemplos son la plata, el cobre y el oro.

En cierta manera, el oro es como el patito feo de los metales. Su color amarillo es único, contrario a la mayoría de los metales que son grisáceos. El oro, en su estado puro, es demasiado blandito y se deforma con facilidad, a menos que se mezcle con otros metales.  No tiene la resistencia del titanio, ni la reflectividad del cromio, ni la abundancia del hierro o el aluminio.





En las últimas décadas, sin embargo, los científicos están descubriendo que el oro es mucho más que un simple metal para hacer joyería, si no que puede usarse como catalizador. Un catalizador es una sustancia que hace que un grupo de reacciones químicas ocurra más rápido, pero sin que el catalizador se “gaste” o “use” en el proceso. Básicamente, el catalizador se convierte en un compuesto intermedio, pero una reacción química al final del proceso lo convierte de regreso a la sustancia original.

La industria de los catalizadores genera $900 mil millones de dólares anualmente. El 90% de todos los productos químicos producidos comercialmente a nivel mundial usan catalizadores en su manufactura.

Por ejemplo, el sistema de escape de gases (“muffler”) de muchos vehículos está conectado a un convertidor catalítico. El mismo usa platino y paladio para convertir contaminantes como el óxido nítrico, monóxido de carbono e hidrocarburos en moléculas más simples y no tóxicas, como el nitrógeno, el oxígeno, el vapor de agua y el bióxido de carbono.

Un problema que la industria de los catalizadores enfrenta es que la selección de catalizadores para cada proceso de manufactura se tiende a hacer de forma empírica, lo que quiere decir que hay que hacer experimentos y tratar diferentes sustancias hasta encontrar la mejor. Este método es costoso y toma mucho tiempo.

Un grupo de científicos, entre ellos Yohaselly Santiago Rodríguez y María Curet Arana, del Departamento de Ingeniería Química, Recinto de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico, usaron un método teórico basado en mecánica cuántica para descubrir si el oro podría usarse como un metal catalizador de manera costo-efectiva. Este estudio se hizo junto a investigadores de la Universidad de Wisconsin en Madison mediante el programa “Wisconsin-Puerto Rico Partnership in Research and Education”, y fue subvencionado por la Fundación Nacional de las Ciencias.

Los investigadores examinaron cómo átomos (por ejemplo, de hidrógeno, oxígeno, azufre, cloro) y moléculas (por ejemplo, de monóxido de carbono, óxido nítrico, bicarbonato y cianuro) interactuaban con la superficie de los átomos de oro. En total, 26 sustancias fueron estudiadas.

En el estudio se calcularon varios parámetros, tales como cuánta energía necesitan estas partículas para ser atraídas (o zafarse) de los átomos de oro, si las partículas son atraídas directamente a un átomo de oro o en el espacio entre átomos, y qué geometrías se crean durante este proceso. Todos los datos ayudaron a Yohaselly, María y sus colegas a predecir qué reacciones químicas el oro ayuda a completar mejor.

En general, se descubrió que el oro es un mejor catalizador para crear moléculas más grandes usando átomos o moléculas simples. Dos ejemplos son la conversión de monóxido a bióxido de carbono, y la conversión de óxido nítrico a nitroxilo. En el proceso de descomponer moléculas grandes en otras de menor tamaño, el oro no es tan buen catalizador comparado con otros metales.

Los investigadores también descubrieron qué productos intermedios podrían producirse en el proceso de catálisis con oro. Esto es importante para maximizar el uso de materia prima y reducir los productos secundarios de desecho. Conocer las propiedades catalíticas del oro también contribuiría a saber qué procesos de manufactura se podrían realizar a baja temperatura, y cuáles procesos son ambientalmente amigables.

Una limitación al usar oro como catalizador es su alto costo. Sin embargo, los científicos han notado que la interacción entre átomos de oro y otras moléculas ocurre solamente en la superficie, así que los átomos dentro de este metal precioso no contribuyen al proceso.

Para superar esta limitación, podrían usarse superficies extremadamente finas, de tan sólo 10-20 átomos de oro en espesor. Por ejemplo, usando estas nanosuperficies, como se les conoce, un gramo de oro podría cubrir todo un parque de béisbol. Mejor aún, el mismo gramo de oro podría usarse en miles de convertidores catalíticos.



Los resultados de este estudio se publicaron en la revista profesional Surface Science.

El autor es Catedrático Asociado en Física y Educación Científica en Morehead State University y es miembro de Ciencia Puerto Rico (www.cienciapr.org).




domingo, 28 de junio de 2015

El Interruptor de la conciencia -La perspectiva de la conciencia desde la neurociencia -


Ángela León Cáceres




Entre conversaciones, libros y publicaciones siempre queda en discusión esa la tan extraña naturaleza de la conciencia humana. Ciertamente, desde la antigua Grecia hasta hoy en día, se mantiene abierta la pregunta referente a ¿qué es la conciencia?
Efectivamente, su definición abarca una gran polémica; la relación mente-cuerpo definitivamente sale a la luz cada vez que la conciencia entra en discusión. Para no abordar el estudio de la conciencia desde todos sus ámbitos, vamos a comenzar por recordar eso que seguramente todos una vez estudiamos en la escuela primaria: la conciencia como un sustantivo abstracto.
Desde esa perspectiva, aparentemente simple, podemos abordar a la conciencia. Si abrimos la página 415 del Tomo III del diccionario de la Real Academia Española, seguramente encontraremos que la conciencia viene del latín conscientia, definida como “Propiedad del espíritu humano de reconocerse en sus atributos esenciales y en todas las modificaciones que en sí mismo experimenta”, también se encontrará la referente a la “Actividad mental a la que solo puede tener acceso el propio sujeto”.  Con esta afirmación lingüística y a lo largo de los trescientos años de historia de la Real Academia Española, un grupo de investigadores de la Universidad George Washington, en julio de 2014 desafía a lo siempre conocido al encontrar aparentemente el interruptor de la conciencia durante un caso de estudio en una mujer con epilepsia.
A pesar de que existen varios estudios dedicados al entendimiento del cerebro humano, se sabe poco sobre las redes neuronales que podrían ser las responsables de activar a la conciencia. Algunas indagaciones suponen el hecho de que la conciencia es el resultado de la integración de numerosas áreas del cerebro. De hecho, una de las investigaciones más importantes en esta área fue desarrollada por Francis Crick, el mismo gran científico que es conocido por su trabajo conjunto con James Watson, al identificar la estructura del ADN en 1953 y ganar el Premio Nobel de Medicina y Fisiología en 1962.



Francis Crick (derecha) y Watson(izquierda) junto a la estructura del ADN. Dominio público tomada de: (http://www.timeshighereducation.co.uk/news/mrc-100-years-of-gratitude/2004881.article)


Francis Crick y su colega Christof Koch, propusieron una hipótesis en la que la delgada zona cerebral conocida como el claustro- del latín claustrum- podría ser la clave para comprender a la conciencia. Aunque el claustro sea una de las estructuras macroscópicas cerebrales sobre las cuales menos conocimiento la ciencia posee, de acuerdo al estudio de Crick y Koch, ésta puede ser la responsable de encender y apagar la conciencia.



Ubicación del claustro en la región cerebral. (Imagen adaptada de cd de Anatomia Netter) Dominio público


Durante el estudio en la mujer con epilepsia de los científicos de la Universidad de Washington, se estimularon eléctricamente diferentes áreas del cerebro; esto se debió a que la epilepsia sufrida por esta mujer le provocaba anormalidades en la actividad eléctrica de su cerebro; teniendo como consecuencia la incapacidad de frenar o inhibir los impulsos eléctricos entre neuronas. Estas descargas eléctricas excesivas se conocen comúnmente como ataques o crisis epilépticas. En el intento de estos científicos de conocer el origen de las anormalidades en la actividad eléctrica del cerebro de la mujer, resultó que la estimulación situada a la izquierda del claustro y en la parte anterior-dorsal de la ínsula cerebral, causó que la mujer empiece a perder progresivamente la conciencia. Esta pérdida de conciencia se vio representada a través de la súbita pérdida de movilidad, bajo ritmo respiratorio y la disminución de su capacidad de respuesta. Pero más sorprendente aún es el hecho de que cuando los científicos dejaron de enviar estos impulsos eléctricos, la mujer inmediatamente recuperó la conciencia sin saber si quiera qué es lo que había sucedido pocos instantes atrás. Esta repetición de estímulos se dio durante dos días consecutivos, teniendo exactamente el mismo resultado en la mujer. Sin embargo, para confirmar que esta estimulación eléctrica no estaba interfiriendo en el control motor o el habla, los científicos le solicitaron a la mujer que repitiese una palabra o una actividad motora antes y durante la estimulación. El resultado fue sorprendente, la mujer empezó a perder gradualmente su capacidad motora y el habla hasta quedar inconsciente.
Aunque no se han realizado más casos de estudio en referencia a este tema y considerando que la mujer padecía de epilepsia; muchos expertos han dicho que este posible descubrimiento del interruptor de la conciencia llegaría a no ser válido. Sin embargo, lo cierto es que este paso significativo en la ciencia nos deja esa duda. ¿Acaso la conciencia es la única que puede hablar por si misma? O verdaderamente ¿nos podríamos encontrar frente al posible interruptor de la conciencia?


Referencias
http://lema.rae.es/drae/?val=conciencia

jueves, 2 de abril de 2015

CERVECIENCIA - HUMANOS 2.0


“Sólo hay una guerra que puede permitirse el ser humano: la guerra contra su extinción”
Isaac Asimov

Hoy en día, la ingeniería genética, así como tecnologías que se encuentran en fase experimental como la nanotecnología, la inteligencia artificial y la colonización espacial, forman parte del ámbito de discusión y nos acercan más y más a que estas tecnologías sobrepasen la ficción.

¿Podría una máquina tener conciencia? ¿Llegará un punto en que un humano pueda ser reemplazado por una maquina? Estas y otras preguntas nacen de la temática de la introducción de nuevas tecnologías que se ha venido manejando en el último siglo.

Ciertos pensadores  estudian los posibles beneficios y peligros de las nuevas tecnologías que podrían superar las limitaciones humanas fundamentales, como también la tecnoética de desarrollar y usar esas tecnologías.



viernes, 6 de marzo de 2015

Ciencia en Ecuador: Nueva trampa para capturar vectores de Leishmania

Escrito por Andrés Carrazco Montalvo (@AndresRCM
Editor: Daniel Romero-Álvarez (@Vakdaro)

Los machos de Lutzomyia sps. (arriba) se alimentan de néctar; son las hembras las que necesitan de la sangre, rica en proteínas, para el desarrollo de sus huevos. Durante el proceso, transmiten el parásito a sus hospederos definitivos.  



Los flebótomos, también llamados moscas de arena (por su color), son considerados vectores o “vehículos” que transportan y transmiten agentes infecciosos causantes de enfermedades como: bartonelosis y leishmaniasis. La última se produce por el flebótomo del género Phlebotomus en el Viejo Mundo y el género Lutzomyia en el Nuevo Mundo. Éste causa infección cuando transporta al parásito Leishmania, que de acuerdo a su especie, puede generar daños de tipo cutáneo, subcutáneo y visceral en la población que se ubica en zonas tropicales de países como Ecuador.

Para estudiar el endemismo, comportamiento, ubicación geográfica e incidencia de estos vectores, es necesario realizar colectas de muestras que sean útiles para realizar análisis estadísticos, poblacionales y epidemiológicos. Con el transcurso del tiempo se han diseñado distintos tipos de trampas que facilitan estos trabajos.

En un estudio realizado por Hashiguchi y su equipo, en 4 zonas tropicales de Ecuador, entre los años 2013-2014, se lograron colectar un total de 1 480 flebótomos hembras pertenecientes a 25 especies de Lutzomyia. Para la colecta se utilizaron tres tipos de trampas:

   .- La trampa mini-Shannon, con la que se colectaron 417 especímenes (28.2 %)
   .- La trampa de luz CDC, que arrojó 259 especímenes (17.5%)
   .- El método “human landing”, donde se obtuvo 804 especímenes (54.3%)

Como se observa los datos de muestreo varían, lo que pudo haber ocurrido debido a factores ambientales, de ubicación o hasta por el tipo de trampa que se utilizó.

Sin embargo, estos resultados no solo indican la presencia del vector de Leishmania, sino también, han dado lugar al desarrollo de la nueva trampa “mini-Shannon” antes mencionada. Esta trampa pesa tan solo 300 gramos, tiene un diseño similar a una carpa cuadrada sin base, compuesta por algún tipo de cebo y con luz de tipo LED que atrae a los flebótomos.

Además, la trampa trae beneficios al investigador, porque demanda menos gastos económicos que la trampa de luz CDC, no trae riesgos elevados como el método “human landing” (donde el ser humano actúa como cebo para los vectores), y en especial, debido a su peso y tamaño permite el muestreo en zonas de difícil acceso como lugares boscosos, rocosos y estrechos localizados en Ecuador.

El encontrar estos nuevos métodos de captura permite que aumente el rango de muestreo, obteniendo muestras de lugares poco comunes y elevando el nivel de investigación y conocimiento científico de la leishmaniasis en Ecuador y, en un futuro, en el mundo.

El artículo original disponible (open-acces) en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4287492/