El 21 de Enero de 2013 a las 22:49:41 (GTM
-5) Júpiter se ocultó. La sombra oeste
de la luna creciente eclipsó al segundo planeta más brillante del cielo
nocturno. El espectáculo fue uno de los eventos astronómicos más destacados de
este año, y tuvimos la oportunidad –contra toda probabilidad en los cielos de
Quito (reseñas de observación infructuosa: 1 y 2) – de disfrutar de
todo el evento
.
La Luna apareció desde temprano en los cielos (15:30, GTM -5). Ese pequeño punto pálido –que resulta ser el planeta más grande de nuestro sistema solar- que se acercaba poco a poco a nuestro satélite pudo ser observado a simple vista en varios países de Latinoamérica: Perú, Paraguay, Bolivia, Chile, algunas partes de Brasil y por supuesto Ecuador.
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La Luna apareció desde temprano en los cielos (15:30, GTM -5). Ese pequeño punto pálido –que resulta ser el planeta más grande de nuestro sistema solar- que se acercaba poco a poco a nuestro satélite pudo ser observado a simple vista en varios países de Latinoamérica: Perú, Paraguay, Bolivia, Chile, algunas partes de Brasil y por supuesto Ecuador.
Tras la preparación adecuada, el equipo
astronómico del Quinto Pilar se preparó para captar el eclipse en sí mismo, la
idea fue obtener fotografías de la silueta siendo sepultada por la sombra
lunar.
Secuencia fotográfica de Júpiter en su tránsito a través de la Luna. Imagen .gif, si no la ves, da "click" en la imagen
…y a las 22:54:06 (GTM -5) se perdió.
Para completar la observación del evento,
esperamos hasta que el planeta vuelva a ser visible, empezó a salir a las 23:38:55 (GTM -5) y su silueta estuvo completa a las 23:42:40 (GTM -5).
De verdad tuvimos suerte. Luego de las últimas fotografías la noche de observación se arruinó, una nube espesa -como ninguna- se apoderó de todo el cielo y la magnitud de la luz estelar se transformó en un destello insignificante. El resto de la noche nos dedicamos a repasar el suceso sin ninguna nueva oportunidad de observación hasta bien entrada la madrugada...
Epilogo:
Un día después de que juntaran caminos, Júpiter y la Luna se apartan indiferentes en sus trayectorias nocturnas
Nubes infranqueables: el destello del fondo es la luz de una Luna completamente enterrada por la nubosidad
Epilogo:
Un día después de que juntaran caminos, Júpiter y la Luna se apartan indiferentes en sus trayectorias nocturnas
Escrito: Daniel Romero (@Vakdaro)
Fotografías: Daniel Romero y Jorge A.
Castillo
Tiempos obtenidos con el software de
observación: Stellarium.
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