jueves, 1 de enero de 2009

Obituario, un viaje personal

El pasado 20 de Diciembre se conmemoró el duodécimo aniversario del fallecimiento de uno de los científicos más conocidos del siglo XX: Carl Sagan.
Su singular elocuencia y la capacidad incomparable de convertir los conceptos inasequibles de la física teórica (por sí misma cruda) en nociones familiares fácilmente manejables son legendarias.
El Quinto Pilar tuvo la oportunidad de familiarizarse con su producción, a manera de divulgación, más famosa, Cosmos que marca un antes y después en las series-documentales de carácter científico. A lo largo de trece capítulos el “Sr. Sagan” recorre la ciencia desde sus orígenes dotándole de un aire épico realmente inspirador que despertó, despierta y seguirá despertando ansias de verdad y conocimiento en las mentes ávidas e inquietas.
La misma producción televisiva se convirtió en un libro sin precedentes que llevó el mismo nombre. Gracias a la tecnología de DVD y este libro toda la información que el gran vocero enunció en su época está disponible y al alcance de la mano para muchas personas; les invitamos a que sean ustedes también testigos de una obra de calidad.
El gran mérito de Sagan fue que, gracias a sus dotes naturales de educador, no descuidó nunca al mundo no científico permitiéndolo acceso a tal información y logrando uno de los objetivos que nuestro grupo persigue hoy por hoy: Hacer entender a la gente que la ciencia es alcanzable, comprensible, en todo aspecto fascinante y permite al buen entendedor apartarse del funesto conformismo que llena de infamia esta cultura.
El camino a las estrellas sigue plagándose de nuevos descubrimientos gracias a tecnologías perfeccionadas (nuevos telescopios terrestres y satelitales, muestras recolectadas de la cola de cometa, gigantes aceleradores de partículas …) , hasta dónde volaría el diente león, tú nave de la imaginación, en está época?? Que felicidad te daría saber que se descubren diariamente planetas fuera de las órbitas del sistema solar y que poco a poco nos acercamos a encontrar ese hermano lejano que permita el florecer vitalicio de tus sueños; como verías atento la tierra anaranjada de Marte con los robots Spirit y Opportunity en pleno funcionamiento sobre su superficie; te alegraría afirmar que conforme pasan los años “el Universo sigue siendo tan indiferente, no hermoso ni hostil, para el hombre”.
Gracias Carl por ensañarnos, al igual que muchos otros, que el único camino es el de la verdad que se forja con esmero, esfuerzo y mucho trabajo al igual que las armas que se llevaban los varones a la batalla. Más dura es la lid ahora no por ser de heridas o desangramientos sino por ser de oprobios, injurias e improperios mal fundados en cimientos pobres como el de la fe ciega y el temor.
Escrito por: Vak

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustaría acotar que Sagan nos muestra en su serie que vivimos en un mismo Cosmos, todos los habitantes de este mundo, sin importar origen geográfico ni profesión de fe. Es por ello que el conocimiento debe ser divulgado de forma tal que pueda ser desarrollado por personas de distintas culturas. Sagan concibe a la ciencia no simplemente como un método para generar más conocimiento, sino como una herramienta útil para mejorar nuestra calidad de vida a partir de la observación rigurosa de la realidad. En sus propias palabras: "Nosotros somos una forma que tiene el Cosmos de verse a sí mismo".