martes, 4 de enero de 2011

El eclipse que pudieron ver millones...

.... excepto nosotros.

Mientras muchos ecuatorianos dormíamos plácidamente por la madrugada de hoy, en el otro lado del mundo se efectuaba el primer eclipse del 2011; uno parcial de Sol que ocurrió entre las 7:30 y 10:00 am, hora universal (2:30 y 5:00, hora de Ecuador), y que lo pudieron ver quienes estaban de día en ese marco de tiempo. Evidentemente, América no fue afortunada esta vez.

Un eclipse que probablemente lo observaron millones, porque ocurrió en lugares tan poblados como Inglaterra, Alemania, España- sabemos que tenemos lectores en ese país, y probablemente muchos son ecuatorianos, cuéntenos ¿cómo vivieron el eclipse?-, Francia, la península Escandinava, Rusia, Mongolia y el oeste de China. Pero también sabemos que en algunos sitios hubo frustración por la conspiración del clima, como en París, Londres y Roma (sabemos de primera mano lo que es eso!, nos compadecemos con ustedes). El mundo árabe, el resto del Mediterráneo y el norte de África también se sumaron, aunque apreciaron el fenómeno en menor magnitud (el disco solar no se cubrió tanto como en los otros países).

Algo que aquí destaca es el hecho de que la experiencia haya sido compartida por personas de tan distintas culturas. Entre las fotos publicadas en los diarios se aprecian cruces católicas de Praga junto al Sol eclipsado (una visión casi apocalíptica!), mujeres caucásicas de ojos deslumbrantes con hojas de papel donde se refleja el disco luminoso seccionado por la Luna (para no lastimar esos simpáticos ojos, me imagino...), y hombres con turbante utilizando las mismas gafas especiales que miembros de una sociedad astronómica en Inglaterra. Me pregunto qué cosas habrán pasado por sus mentes al percatarse que estaban siendo testigos del mismo evento junto a colegas de tan diversos pensamientos.

Bueno, a la final no somos tan distintos después de todo, compartimos un legado, representado en este caso por la curiosidad y el asombro ante el mismo fenómeno, y el acceso a la información necesaria para conocer la hora y los lugares precisos para su observación. Pero luego me viene la siguiente pregunta a la cabeza: si los eclipses antes eran relegados exclusivamente al plano de lo místico y sagrado y ahora pueden ser tan bien entendidos desde un punto de vista científico (no me refiero sólo a las predicciones, que eso también lo hacían los astrólogos de culturas antiguas, sino también a las causas por las que se produce el fenómeno), ¿Qué pensarán muchas personas al respecto?. Tal vez no haya que indagar lejos, de seguro en una revista de farándula o en los mismos diarios los horóscopos podrán darme parte de la respuesta.

Bueno, sin más, ahí les dejo una muestra de fotos de cómo se vivió el eclipse varios de esos países. Pero antes, quiero recordarles que habrán más eclipses este año (3 parciales de Sol y 2 totales de Luna); sin embargo, la suerte ha dispuesto que en estas tierras equinocciales con costas bañadas por el Pacífico (en peces abundoso) y encantadores paisajes andinos no se pueda visualizar ninguno, jeje. Talvez haya que hacer como esa pareja de venezolanos en Egipto que también aparecen en la serie de fotos del eclipse de esta madrugada; por mi cuenta ya estoy averiguando el costo de un pasaje a Buenos Aires para este junio!

Bueno, ahora sí, las fotos; ah, y cierto, un feliz año 2011!:

Eclipse observado en Tomsk, Rusia. (Autor: Galvconst; distribuido bajo Creative Commons 3.0)


En Alemania también se sintieron los estragos de la bruma; pero en esta foto tiene un efecto muy evocador. Foto: Martin Julius (Flickr.com)


Secuencia del eclipse. Foto: Vicenzo Giordano (Flickr.com)

El diario The Guardian del Reino Unido tiene una galería con buenas fotos del eclipse.

En Ecuador, el diario La Hora tiene otra buena compilación de fotos.

Advertencia: Si vas a tomar fotos al Sol o un eclipse solar se recomienda que utilices un filtro apropiado para no dañar el sensor de la cámara. Recuerda que también es peligroso observar al Sol directamente. Hay investigadores que piensan que el famoso matemático Euler, inventor de la constante e (la "e" es por Euler), se quedó ciego del ojo derecho por observar mucho tiempo al Sol sin protección.

Escrito por: Carlos Antonio Rodríguez

domingo, 2 de enero de 2011

La subconciencia revelada

...o, bases neuronales de la percepción subconciente de señales emocionales.

Cuando miramos una fotografía, un paisaje, o un piano, lo que ocurre usualmente es que la luz de la imagen ingresa hasta la retina de nuestros ojos para después continuar por las respectivas vías visuales hasta el tálamo (es importante recordar que la mayoría de percepciones sensoriales –visuales, auditivas, táctiles, etc – deben pasar por aquí) y de ahí a la parte posterior del cerebro denominada corteza visual primaria. Luego de esta parada, la señal alcanza otros centros de la corteza cerebral (la parte más superficial del cerebro y la encargada del procesamiento conciente de las cosas) para recrear todo lo que implica la respuesta a ese estímulo; en el caso del piano, esa necesidad imperiosa de tocar las teclas en coordinación perfecta para crear una melodía...
Sin embargo, existen en el cerebro otros centros encargados de ciertas peculiaridades que ocurren al percibir un estímulo. Por ejemplo, cuando miramos el rostro de una persona, lo que usualmente hacemos es saludarle y cordialmente realizar el ritual oportuno de la conversación, siempre y cuando conozcamos a dicha persona; para ello tenemos que primero reconocerla. Para reconocer a alguien tenemos dos opciones, la primera es analizar sus dos ojos, su nariz, sus labios, las arrugas de sus comisuras, los pómulos, el vaivén de sus cejas, la forma de las pestañas, la distribución del cuero cabelludo de su cabeza, etc, etc, y compararlo con la imagen que tenemos en la memoria….la otra opción es ver el patrón que forma su rostro con todos esos elementos, en otras palabras, podemos reconocer el conjunto de todas sus facciones y no uno por uno. Una vez que la señal llega a la corteza visual toma la denominada “vía ventral” y llega a una zona de reconocimiento global, la corteza occipitotemporal, que realiza precisamente la segunda opción mencionada.
La percepción de estímulos subconcientes es otra de estas peculiaridades de la visión como lo demuestra la serie de experimentos realizados para aclarar este tópico. Antes de continuar, conviene decir que este subconciente no tiene nada que ver con el inconciente freudiano, mismo que propone la existencia de un mecanismo de supresión activo de percepciones concientes, es decir, una especie de negación de lo que concientemente recibimos.

Los estímulos subconcientes son aquellos que despiertan una respuesta en el sujeto que los observa sin que él mismo se dé cuenta de ellos. Estudiar este tipo de procesamiento cerebral es particularmente desafiante porque implica enviar un estímulo al cerebro sin que despierte el conocimiento del sujeto pero que pueda ser medido por el experimentador. Para lograrlo, los científicos han usado métodos de ocultamiento de estímulo (sensory unawareness) en el que se presenta muy brevemente una imagen seguida inmediatamente de otra imagen (neutral) en un intervalo de tiempo (menor a treinta milisegundos) en el que el sujeto solo puede dar razón de la segunda imagen. Para poder detectar el funcionamiento cerebral y la respuesta se utilizaron estudios de imagen cerebral como la resonancia magnética funcional (MRI en inglés, crea una imagen dependiendo de las zonas cerebrales activadas en determinado momento), electromiografía (en este caso, mide la respuesta contráctil de los músculos de la cara), detectores de dilatación pupilar, un interrogatorio al sujeto del experimento respecto a las imágenes presentadas, etc. Teóricamente el estímulo no tiene la capacidad de ingresar a la corteza primaria visual (y por ende a la conciencia) porque el estímulo no tiene tiempo para ello.
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Podemos observar los electrodos de detección de actividad muscular en regiones importantes para la expresión facial, y detectores de reacción pupilar. Las curvas muestran la respuesta de estímulos concientes vs no-concientes.


Obviamente uno de los sesgos más importantes es el hecho de depender de ese teóricamente, y en la percepción subjetiva del sujeto de experimentación. Sin embargo, el caso más impresionante es el denominado en inglés “affective blindsight”. Los ciegos involucrados en el estudio tienen la particularidad de serlo por tener dañada la corteza visual primaria y tener sus ojos y sus vías visuales intactas. Al colocar a pacientes de estas características frente a caras con expresiones amenazantes o de miedo, en un ambiente carente de sonidos, ellos pudieron expresar la emoción correspondiente a ese estímulo correctamente. Parece imposible, pero este proceso es viable gracias a la existencia de esta vía de procesamiento alternativa en el cerebro. Una vez llegada al tálamo, la señal visual se desvía hacia un área denominada colículo superior, de ahí al pulvinar y de ahí a la amígdala (que tanto me gusta). Esta vía es la encargada de procesar información de forma más rápida y general, está particularmente activada a la hora de percibir estímulos subconcientes de características emocionales primarias (rostros intimidantes, rostros tristes, posturas corporales amenazantes). Con “primario” me refiero al hecho de que al colocar una casa en llamas frente a los sujetos, no pudieron identificar la emoción que se puede asociar a esa imagen puesto que necesariamente implica la comprensión conciente de muchas otras connotaciones.No solo los sujetos ciegos respondieron acertadamente a este tipo de estimulación. Cuando se utilizaron pacientes saludables para el experimento y se usó la estimulación magnética transcraneal (TMS por sus siglas en inglés) para bloquear la corteza visual primaria y crear una ceguera temporal, también pudieron acertar a la hora de expresar el tipo de emoción correspondiente al rostro o postura presentados, esta aclaración es importante puesto que podría argumentarse, respecto al sujeto ciego, que la carencia prolongada de visión y la neuroplasticidad propia del cerebro les ha permitido detectar ese tipo de estímulos.
En el gráfico se presentan todas las vías relatadas en el texto. La vía de percepción conciente está representada por la línea contínua que va hasta VI y luego sigue por la parte dorsal del cerebro. La línea punteada va a la corteza occipitotemporal (ventral). Se observan también los núcleos implicados en la percepción subconciente. (VI, corteza visual primaria; Th, tálamo; SC, colículo superior; Pulv, pulvinar; AMG, amígdala)


Las detección de esta vía neuronal tienen implicaciones importantes a la hora de comprender el desarrollo filogenético de nuestro cerebro. En el libro “Los Dragones del Edén” del siempre recordado por el Quinto Pilar, Carl Sagan, se hace una formulación prodigiosa de la hipótesis del cerebro triuno de Paul Maclean, en esta se propone que la funcionalidad del cerebro tiene resonancia con el desarrollo evolutivo de las especies, correspondiéndole a cada una su espacio de acuerdo al tiempo de aparición en la historia natural; el más antiguo, el tronco cerebral, solo tiene dominio sobre las funciones vitales automáticas (respiración, latido cardíaco); el sistema límbico es el segundo nivel y a este pertenecen la amígdala y muchos de los otros núcleos implicados en la percepción de las emociones y, por lo que respecta a esta publicación, del estímulo subconciente; el último nivel corresponde a la corteza cerebral ya mencionada anteriormente. Si bien este modelo ya no está en uso, es un recurso muy útil para figurarnos rápidamente la idea de la filogenia cerebral.
Estudios realizados en cerebros de aves, ratones y chimpancés corroboran la existencia de análogos a este sistema; al parecer, los animales que compartimos el desarrollo de un sistema límbico tenemos la capacidad de percibir estímulos de una forma rápida, no detallada, de escenarios implicados en la supervivencia (ratones con lesiones en esta vía no reaccionaban con esmero a la presencia de cruentos gatos). Por esta misma línea, estudios en primates humanos y no-humanos muestran que esta vía de percepción está mucho más desarrollada al nacimiento (ontogenia), cuando otras áreas corticales todavía se encuentran inmaduras.
a. Cerebro de ave; b. cerebro de roedor; se muestra en el gráfico vías cerebrales análogas al sistema de percepción subconciente descrito en el texto.


Esta evidencia ponte en quiebre la concepción habitual del subconciente, aquella en la que ese sub de la palabra delata su carácter de subyugado o degradado a la conciencia, a la gnosis de los estímulos. Este modelo sugiere la existencia de todo un sistema no cortical de percepción que goza de independencia y está activo normalmente en un cerebro saludable. Pero las consecuencias de este hecho todavía no están totalmente dilucidadas, no se sabe si esta percepción podría influir directamente en la toma de decisiones o en el comportamiento cotidiano, no se puede asegurar tampoco si tan solo las emociones negativas son las que participan en la activación de este sistema; dado el conjunto inconmensurable de expresiones faciales, agregadas al contexto particular de cierta situación, es difícil aseverar que solo las manifestaciones negativas despierten estos centros subcorticales de percepción.

Bibliografía: Marco Tamietto y Beatrice de Gelder; Neuronal bases of the non-conscious perception of emotional signals, Nature Reviews of Neuroscience, Octubre 2010.

PD: Se deben haber percatado que las palabras conciente, subconciente, concientemente, etc. están escritas sin la “s” de lo que naturalmente encontramos como consciente; la razón de ello es que la Real Academia de la Lengua acepta dentro de sus cánones la palabra conciencia pero no conciente, para la Real Academia, parece mejor poner esa S en medio de la N y la C de la palabra que no viene de ningún lugar. Sería muy grato discutir respecto al artículo y respecto a esta cuestión. No creo que la Academia se de estos lujitos...o si se los da, es una invitación a evitar tener al diccionario como la última palabra de las cosas...

Escrito por: Daniel Romero

jueves, 30 de diciembre de 2010

Cometa dará un espectáculo en el 2011

Fotografía del cometa McNaught, realizada el 17 de enero del 2007 por Steve Crane (Flickr.com). Según los expertos, el fenómeno es similar al que ocurrirá a mediados de septiembre del 2011 con el cometa Elenin.

Por: Carlos Antonio Rodríguez

Según lo que reporta Sky&Telescope, el cometa Elenin podría darnos un espectáculo inolvidable para finales del 2011.

El cometa, que fue descubierto apenas el 10 de diciembre del año saliente, estará en perihelio (el punto más cercano al Sol dentro de su órbita) el 5 de septiembre, y resulta que su perihelio ocurre al interior de la órbita de la Tierra. El resultado es que el cuerpo, hasta ahora visible sólo con telescopio, podrá ser apreciado a simple vista un par de semanas alrededor del perihelio.

Además, la estela que dejará el cometa estará bien iluminada por los rayos solares, dejando apreciar su larga cabellera a los espectadores en la Tierra.

Todavía los resultados del los cálculos astronómicos no son muy exactos como para realizar ciertas afirmaciones, pero hay que estar atentos a los avisos de los astrónomos en los próximos meses para no perder esta experiencia (por nuestra parte trataremos de actualizarnos y hacer las respectivas notificaciones, así que también estén atentos al Quinto Pilar!).

Para más información, pueden entrar al link de Sky&Telescope.

Por lo pronto les deseo un buen año 2011 y mucho éxitos!

sábado, 25 de diciembre de 2010

¡Feliz Sol Invicto!

Por: Carlos Antonio Rodríguez

La antigua festividad pagana del Sol Invicto ha tomado popularidad reciente, debido en gran parte a la famosa explicación que la película Zeitgeist propone respecto a la vida de Jesucristo. En este controversial documental se presenta a Jesús como una figura recurrente en varias religiones que bajo los nombres de Zoroastro, Horus, Prometeo, Atys, y otros más, pretende explicar mitológicamente el movimiento del Sol en la esfera celeste a lo largo del año. Precisamente, el 21 de diciembre ocurre el solsticio de invierno ( de verano para el hemisferio sur), fecha en la que el Sol se encuentra en el punto más austral de su movimiento anual; después, el Sol empieza a moverse hacia el norte, anunciando que la primavera está en camino (disculpas por el carácter norteño de la historia, pero fue desde ahí donde se difundió). El cambio de dirección en la trayectoria del Sol es notorio desde el 25 de diciembre; y por ello, según el autor de Zeitgeist, la navidad no es nada más que una historia que encubre el renacimiento del astro rey, y de la salvación para la Tierra, pero de la hostilidad del frío invernal.



Varios expertos han refutado mucho de lo que se dice en Zeitgeist (y no me refiero tan sólo a las clásicas páginas evengélicas y apostólicas; han habido críticas por parte de fuentes como la revista Skeptic). Además, hay quienes opinan que una de las referencias fundamentales de la película, un libro del egiptólogo Gerald Massey, carece de la seriedad necesaria para considerarla verosímil. En mi opinión sí se exageró en muchos detalles, pero hay cosas que difícilmente se prestan a dudas entre expertos. Por ejemplo, no es sorpresa que la navidad se haya impuesto sobre no solo una, sino varias celebraciones paganas que tenían como objeto el culto al solsticio de diciembre (aunque Joseph Ratzinger diga que tiene ciertos argumentos que apoyarían lo contrario). La más conocida es la festividad del Sol Invicto, el dios solar oficial de Roma, instituida en el año 274 por el emperador Aureliano para consagrar el advenimiento de la primavera. Muchos se preguntarán cómo es posible que la navidad haya suplantado una fiesta instituida después del nacimiento de Cristo; pero hay que considerar que también hubieron festividades más antiguas consagradas al Sol y celebradas en la misma fecha (eg. Saturnalia) que pudieron haberse prestado como antecesoras, y que muchas fiestas cristianas adquirieron un carácter más oficial luego de la época de Constantino (siglo IV).

El dios romano Sol

Y no sólo fue en Roma: cuando el cristianismo se expandió al resto del mundo, tuvo que imponerse sobre otras costumbres de la misma importancia. Por ejemplo, en la Europa alpina la gente acostumbraba a disfrazarse de personajes mitológicos en época del solsticio de diciembre (muy parecido a una fiesta de Halloween), y entre ellos era popular el hombre cabra llamado Krampus. Los cristianos tuvieron muchos problemas para que la gente se olvidara de tales "perversidades demoníacas"; así que no les quedó más remedio que acoplarse a ellas. La historia muchas veces nos demuestra que la lucha entre ángeles y demonios no siempre termina con vencedores indiscutidos, sino que hay que recurrir a la negociación. Krampus adquirió un nuevo rol en el folclor europeo como un demonio navideño, compañero de nadie más que San Nicolás. Mientras el santo repartía presentes a los niños buenos, Krampus azotaba y hasta secuestraba a los malcriados. Antes del siglo XX era común ver juntos a ambos personajes en las tarjetas navideñas, como si fueran compañeros entrañables de trabajo. He aquí un ejemplo:

Y por supuesto, la región andina también fue escenario de intentos de entierros de antiguos ritos; con mayor razón, si se considera que las civilizaciones prehispánicas tenían un excelente conocimiento sobre los movimientos del Sol. Todavía nos quedan ecos de esas celebraciones, y por ello es común escuchar los nombres de Cápac Raymi o Inti Raymi en estas fechas. Están ahí para recordarnos el paso de otras civilizaciones; y no se permite que desaparezcan del todo porque de hecho ayudan a complementar el mito cristiano, que por sí mismo no satisface ciertos aspectos rituales del comportamiento humano.

Es así que sea cual fuere la razón por la que usted celebra la navidad, le deseo lo mejor para estas fiestas, recordándole que el carácter de la época es todavía más universal que lo dispuesto por una sola entre tantas historias propuestas para la ocasión.

martes, 21 de diciembre de 2010

La proeza

Por: Carlos Antonio Rodríguez

He aquí los resultados del eclipse total de Luna desde la región de Pichincha, en Ecuador: muy escasa visibilidad, apenas unos pocos afortunados tuvieron breves instantes del espectáculo.

Desde las 19:00 del 20 de diciembre estuvimos tras la cacería de condiciones meteorológicas óptimas; pero sin resultado. La estrategia era promisoria. Esta vez decidimos movilizarnos en carros particulares a dónde quiera que sospechábamos que tendríamos un cielo despejado. Al ver que en Quito la cosa no andaba tan bien, nos movilizamos rápidamente al Parque Jerusalem. Ahí aguardamos al resto del grupo, mientras buscábamos un resquicio en el tapete de nubes que se cernía sobre nosotros. Una vez reunidos todos, razonamos que la capa de nubes, que se trataba de un estrato, no debía estar muy lejos de nosotros, talvez a 300m de altura sobre el suelo. Así que armados de un mapa topográfico y un GPS buscamos la localidad más cercana que sobresaliera de aquel punto. La candidata resultó ser Malchinguí, a unos 5 Km al norte.

Mientras tanto, nuestros corresponsales en Quito (uno al sur y otra al norte) e Ibarra nos informaban acerca del estado meteorológico. Ibarra tenía sus sectores despejados, mientras que en Quito la cosa no andaba tan bien. Y nosotros, envueltos por la neblina, en una carretera por medio del desierto, logramos tener un avistamiento de la Luna y sus cráteres. De pronto, nos encontrábamos sobre la nube; en efecto!, no era tan alta, y ahora aparecía apenas como una fina bruma colándose entre los valles del callejón interandino. Sin embargo, todavía quedaban uno nubarrones de los que queríamos deshacernos, así que optamos por ir más alto. Fue así como llegamos a Cochasquí. La ruta la habíamos descifrado en ese momento, con ayuda de nuestros instrumentos de navegación. Pero el lugar no era nada prometedor.

Vientos ascendentes en torno al Mojanda parecían crear una densa capa de nubes, muy difícil de superar. A ratos teníamos una vista privilegiada del valle. Pero la temperatura bajaba conforme se acercaba la medianoche, de tal forma que la humedad del ambiente empezó a condensarse y formar la terrible neblina que terminaría frustrando nuestra empresa. Así que regresamos a Malchinguí.

Eran las 1:00, y ninguna mejoría en el cielo. Por el contrario, la humedad seguía condensándose, surgiendo nubes donde antes no habían. Aprovechamos para calentar un poco de agua con el MSR, y tomar un café bien caliente; justo a tiempo para recibir la inoportuna llovizna. Esperanzados de que aquello sea una señal de que las nubes se estén disolviendo, regresamos a los automóviles a dormir unos minutos.

Las 3:00, y nada! Pocas cosas peores hay en la vida que los intermedios irresolubles. Las nubes descargaron su contenido, pero no lo suficiente para un buen claro. Sin embargo, a través de algunas ventanas notamos que el cielo estaba más oscuro. La Luna había perdido su brillo. En una breve aparición, la vimos bastante recortada en silueta; pero tampoco podíamos dejar de atribuir aquella imagen a un eclipse, pero de nubes borrascosas. Eran las 3:20, cuando recibo una llamada. Era mi amiga Alicia, desde el norte de Quito, ¨Estás viéndolo Carlitos?, la Luna está roja!!, y la cabeza de Orión descubierta cerca de ella". Era algo de esperarse en realidad, la correcta conclusión de nuestros esfuerzos estaba esa noche, en gran parte ligada a la suerte. Avanzamos tan rápido como pudimos hacia Quito, y lo logramos en apenas 45 minutos. Pero ya era tarde, el cielo se inmisericorde se había sellado nuevamente, y el panorama estuvo idéntico al de Malchinguí.


Epílogo: Acerca de cómo atreverse a defender lo indefendible (pretender observar un eclipse en plena tamporada de lluvias).
Lo que hicimos podría tacharse de arriesgado. Nunca tuvimos una buena probabilidad de alcanzar lo que deseábamos. resulta que en esta época del año, según lo reportado por el Inhami (http://www.inhami.gov.ec/) dos corrientes de aire húmedo convergen en el norte del Ecuador, una desde Venezuela y Colombia y otra desde la Amazonía. Ello provoca una fuerte acumulación de nubosidad, y condiciones poco favorables para la observación de fenómenos astronómicos.

En realidad, habían formas en las que se podía esquivar este problema. Una de ellas era subiendo a una montaña alta, que saliera del nivel de los estratos. Podía ser Cruz Loma, en el Pichincha, a 4000m. Ello no es tampoco una garantía, porque a veces hay nubes sobre esta altitud (pero de lo que observamos esta madrugada, parece que no era éste el caso concreto). Otra opción era viajar a un sitio que no se vea afectado por el clima preponderante en la sierra del Ecuador. En tal caso, podíamos haber ido a El Oro o Manabí. Pero logísticamente, nos era muy complicado.

Al final valió la pena el riesgo. Obtuvimos apenas 2 segundos de eclipse parcial, pero también una noche inolvidable en compañía de buenos amigos. Y sabemos que sí hubo gente que observó el fenómeno con mayor claridad, y que también se esforzaron por aguardar el momento exacto. Lo importante aquí es difundir el conocimiento, y que más personas puedan experimentar estos fenómenos en primera fila.

Cuéntanos, cómo viviste el eclise?


Video publicado en Youtube sobre el eclipse lunar del 21 de diciembre. Producido por Karem Brown.